La Fundación Real Sporting – Marea Rojiblanca, en colaboración con la Fundación Pequeño Deseo, ha hecho realidad el sueño de Raúl. El pequeño sportinguista, de nueve años de edad, fue diagnosticado en enero de leucemia linfoblástica aguda. Inspirado por su ídolo Rubén Yáñez, Raúl sueña con ser portero y, gracias a esta iniciativa, él y su familia vivieron un día mágico que nunca olvidarán.
Un primer regalo le esperaba en la Escuela de Fútbol de Mareo. Raúl, acompañado por sus padres y su hermana Nerea, se dirigió a la sala de prensa, desde donde pudo disfrutar del entrenamiento del primer equipo. La presencia de Joaquín Alonso, responsable de Relaciones Institucionales del Club, sirvió como guía perfecto de la visita compartiendo anécdotas y curiosidades del día a día de los futbolistas.
Después de la jornada de trabajo del equipo, llegó uno de los momentos más esperados: el encuentro con los jugadores. El sueño de Raúl se hizo tangible cuando Yáñez le entregó una camiseta y unos guantes personalizados. Dani Queipo también quiso participar en esta bonita acción y obsequió a su hermana Nerea con una camiseta rojiblanca. La plantilla se acercó para estar con Raúl, sonriente en un momento tan feliz. Miguel Ángel Ramírez, impresionado por la fortaleza de la familia, tuvo un gesto de cariño hacia ellos.
Los hermanos, felices por conocer a sus ídolos en persona y pasar tiempo con ellos, no podían contener la emoción. Sobre el césped posaron juntos con una pancarta de apoyo para el pequeño. “La vida le cambió de un día para otro. Tuvo que dejar el fútbol, el colegio y alejarse de los amigos. El venir aquí a Mareo y conocer a algún futbolista le servirá para llevar el tratamiento mucho mejor“, explicó Ana María Calvo Díaz, madre de Raúl.
Posteriormente, la familia fue citada para visitar El Molinón, donde otra gran sorpresa esperaba al protagonista. Lo que el pequeño no sabía es que sus compañeros de fútbol estaban escondidos dentro del estadio esperándole. “Llevamos mucho tiempo sin verle. Tenemos ganas de abrazarle y estar con él”, comentó, emocionada, su amiga Jimena.
Tras este reencuentro que tanto ansiaban, y llenos de felicidad por volver a estar juntos, los pequeños conocieron el estadio rojiblanco. Para terminar, se reunieron en un corro animando a Raúl a afrontar su tratamiento, contagiándole su amor y cariño.
Esta iniciativa es una muestra más del compromiso del Real Sporting de Gijón y la Fundación Pequeño Deseo con los sueños y la esperanza de niños y niñas que enfrentan fuertes desafíos.
